Dada la enorme variedad de ejercicios que conseguimos para adaptar a nuestros entrenamientos, hoy vamos a ver cómo diseñar un ejercicio de fútbol a partir de una acción de partido.
Es posible que durante el partido, tu equipo haya entrado en una situación de juego donde el rival los supera por muy poco. Puede que incluso estas situaciones tipo no hayan sido trabajadas en las prácticas de fútbol.
Para aprovechar estas acciones de partido, conoceremos seis puntos claves que te ayudarán a hacer un ejercicio de fútbol adaptado a tu equipo para incluir en tu rutina de entrenamientos. ¡Comenzamos!
Planteando una situación a partir de una acción de partido
Vamos a proponer un caso de un partido pasado en el que has percibido una situación de juego en la que la circulación de balón de tu equipo es muy lenta. Tu rival aprovechó esta situación para robarles el balón y crear situaciones de peligro.
Has tomado nota de esto y luego en las prácticas de fútbol has decidido implementar un ejercicio para cubrir esta deficiencia.
Con el caso planteado y los recursos a la mano, vamos con las seis claves para saber cómo diseñar un ejercicio de fútbol a partir de una acción de partido.
- Primero: visión aérea
Lo primero que vamos a hacer es sacar el ejercicio desde una vista aérea. Así como lo vemos en la tele. De tal manera que percibas la situación del partido como si fuese una vista de dron con todos tus jugadores, los jugadores rivales y las situaciones donde se comete el error.
Dada la naturaleza analítica de este punto, es recomendable usar recursos visuales como una pizarra para asimilar mejor las ideas. Recuerda que una imagen vale más que mil palabras.
- Segundo: posicionamientos
Lo segundo, es enfocarte en tu equipo y posicionarlo de tal manera que establezcas los movimientos de apoyo, de ruptura, el posicionamiento del cuerpo de los jugadores y los perfiles que se tienen que dar en situación de control del balón.
Indicar también el lugar de la cancha donde tu equipo necesita hacer ese control para poder darle continuidad a la jugada. Para esto necesitas basarte en las acciones de los partidos anteriores más recientes.
Sé explícito al momento de dar las indicaciones. Para que luego tus jugadores trasladen a la cancha de entrenamientos estos conocimientos y logren asimilarse a través de las prácticas de fútbol.
Comenzando el diseño del ejercicio de fútbol
- Tercero: movimientos
Tercer punto; situar a nuestros jugadores en disposición de dónde se está moviendo el balón, es decir, los movimientos que buscas que se definan en función del balón.
Orienta a tus jugadores a situarse activamente para que sigan y tengan mejor control del balón. Recuerda que estamos trabajando en la circulación de balón y hay que acostumbrar a los jugadores a integrar estos movimientos como acto involuntario.
Es decir, que no tengan que pensar mucho cómo situarse, cómo orientarse, sino que al recibir el balón ya posean una postura de recibimiento por instinto. Por supuesto que este nivel de asimilación se alcanza luego de varias sesiones y una rutina de entrenamientos bien estructurada.
- Cuarto: defensa pasiva
En el cuarto, punto introducimos jugadores con defensa pasiva y funciones limitadas. De tal manera que sólo intercepta en la circulación de balón siempre y cuando el golpeo sea malo o siempre y cuando el balón pasa en torno a su zona de influencia.
Añade rivales pasivos con motivo a mejorar los movimientos de apoyo y desmarque, incluso en el control del balón para darle continuidad al juego.
¡Ojo cuidado! Asegúrate que los defensas se limiten a una labor pasiva para que el ejercicio haga el efecto que buscamos en el equipo. Por supuesto que habrán algunos jugadores que buscarán avanzar más rápido y eso es un punto que debes estar atento.
No está demás recordar que este ejercicio debe ser gradual en la dificultad. Luego de haber practicado las posturas y movimientos, añadir defensas es el siguiente paso lógico. ¿Qué tipo de marcas usar? Para empezar usa marcación por zona para luego, en el siguiente punto, emplear una defensa más activa.
- Quinto: defensa activa
Ahora haz que estos mismos rivales empiecen una defensa activa. Tras incorporar el ejercicio en la rutina de entrenamientos, a este punto ya has corregido la circulación de balón, movimientos y la mayor parte de los aspectos que pueden llevar a una circulación poco fluida y haya errores en los ejercicios.
Incrementa la dificultad introduciendo rivales activos. Ya pueden robar, ya pueden chocar, ya pueden luchar, marcas individuales, hacer presión y buscar el error tanto en la circulación como en el control del balón.
No necesitas hacer un plan elaborado de la defensa activa al realizar el ejercicio, más bien aprovecha las acciones de los rivales en partidos pasados. Aprovecha las anotaciones de tu asistente, video análisis, y recrea las acciones defensivas del rival.
Hasta este punto la mayoría de los entrenadores suele quedarse y pensar que el trabajo ya está realizado, pero hay un sexto punto clave esencial en cómo diseñar un ejercicio de fútbol a partir de una acción de partido.
Paso fundamental al diseñar un ejercicio a partir de una acción de partido
- Sexto: continuidad
El sexto punto, fundamental para este espacio Aprende Entrenando, y en el que muchos entrenadores se olvidan y dan lugar a errores que es darle continuidad.
Los ejercicios deben tener continuidad en las prácticas de fútbol. Todos los ejercicios tienen inicio y final, y como entrenador debes establecer bien donde inicia y donde finaliza la acción.
Y también observar qué ocurre si el balón sale fuera, si hay un error o un balón perdido. Por ejemplo, ¿qué ocurre si me ha robado el rival? Hay un contraataque, debo organizar el equipo para ese contraataque.
La esencia de la continuidad de los ejercicios es, volviendo al ejemplo que estamos trabajando de la circulación de balón, que en una acción de partido puedes perder el balón y tu equipo necesita responder. Y esta respuesta se logra trabajándolo en la rutina de entrenamientos.
Porque de lo contrario, al no darle continuidad, puedes generar la situación contraria. A lo mejor tu equipo no hace nada, o reinician la jugada y tus jugadores no están activados para poder robar el balón.
Incluso pueden perder tiempo esencial de partido pensando cómo posicionarse, la reacción llega tarde y crear un caos innecesario en pleno partido que pudo haber sido solventado dándole continuidad al ejercicio trabajado en las sesiones de entrenamientos.
Es importante darle continuidad, establecer qué pasa si el balón se va fuera, desde donde se inició y darle sentido a todo lo que se está haciendo.
Consideraciones finales sobre cómo diseñar un ejercicio de fútbol a partir de una acción de partido
Un plus que recomendamos desde Aprende Entrenando es aprovechar el trabajo analítico en estos casos. ¡Es súper importante!
Todos esos controles que se pueden dar, que han sido lentos, todas esas situaciones de juego en las que el perfil del jugador no ha sido bueno se puede trabajar con ejercicios analíticos.
Estas sesiones de ejercicios analíticos engrandecen aún más todo lo que es la tarea y permite que todos tus jugadores estén funcionando en función del ejercicio que vas a hacer a nivel global.
¡Y hasta aquí llegamos! Espero que esta entrada te haya ayudado a saber más sobre cómo diseñar un ejercicio de fútbol a partir de una acción de partido. ¡No olvides dejarme en los comentarios tus dudas!
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Un saludo y nos vemos en la siguiente entrada. ¡Chao!