En esta ocasión vamos a analizar las capas que tiene que tener un ejercicio de fútbol para que sea completo en cada una de ellas y vamos a ver de qué manera las podemos cumplir.
Antes de empezar, hay que tener una cosa clara en mente y es que además de entrenar el físico de los jugadores, también hay que estimular sus emociones y así también ponemos a entrenar la mente.
Una rutina de entrenamientos debe contemplar ambos aspectos, físico y mental, para tener un ejercicio completo. A continuación vamos a explorar cada una de las capas que un buen ejercicio de fútbol debe contener, ¡vamos con ello!
Ideando el ejercicio
A la hora de sentarnos a redactar un plan de entrenamientos e incorporar ejercicios de fútbol que consideremos adecuados, hay que hacerlo de manera asertiva. Que deje contentos a los jugadores y que cumpla con lo que teníamos en mente para reforzar a nuestros jugadores.
Puede haber miles de maneras de estructurar un ejercicio dentro de una rutina de entrenamientos, y desde este espacio te sugiero hacerlo de la manera más sencilla posible.
No os sobre compliquéis mucho, porque para que un buen ejercicio sea efectivo tiene que cumplir con tres simples criterios: que sea divertido, repetitivo y que genere emociones.
La diversión no solamente tiene que ser alegría y entretenimiento, sino que genere una sensación de agrado y familiaridad, que el jugador sienta confianza al realizar el ejercicio.
La repetición es la clave para que un concepto, una enseñanza, sea asimilada por la mente. Son las rutinas, las actividades repetitivas, la repetición lo que convierte ese concepto vago que se instruye en algo tangible que el jugador adopta como propio.
Y es de nuestra conveniencia despertar emociones durante los ejercicios. Emociones positivas que aprovecharemos para canalizar en la ejecución del ejercicio.
Este último punto es muy importante, de modo que nuestros jugadores sientan de verdad que están logrando un progreso por medio de los ejercicios que les despiertan emociones. Y ahora, vamos a analizar cada uno de estos tres puntos por individual y lo que podemos extraer de cada uno.
Capas del ejercicio
- Debe ser divertido
La primera capa de los ejercicios de fútbol que apliques es que debe ser divertido. Cuando tú te diviertes generas una actitud correcta para poder seguir con la tarea que estás haciendo.
No queremos que la actividad sea divertida en sí misma. Sino que le produzca la actitud correcta al jugador para poder seguir creciendo con ese ejercicio y aprender los conceptos que queremos enseñarle a posteriori.
Una actitud divertida condiciona mucho mejor a los jugadores para realizar el ejercicio de manera correcta. Cambias la visión de la rutina de entrenamientos hacia algo que trae gratificación a los jugadores.
- Tiene que ser repetitivo y tener continuidad
La segunda capa que debe tener un ejercicio dentro de la rutina de entrenamientos es que tiene que tener una continuidad. Tiene que tener una repetición. Así como construimos hábitos debemos hacer en nuestros ejercicios de fútbol.
Hemos hablado que la primera etapa era que tenía que ser divertido y la segunda que tiene que haber una repetición del concepto de lo que queremos transmitir. Así, mediante esa repetición, el jugador podrá asimilar el concepto que queremos enseñarle.
Pero ojo cuidado, que esta repetición no sea cansina, al borde del agobio, no. Es aquí donde tú como entrenador tienes que encontrar oportunidades en donde repetir los conceptos que enseñes en tus entrenos. ¿Tienes alguna experiencia de tus entrenos? Háznoslo saber en los comentarios.
- Debe generar emoción
La tercera y última capa que para mí es un punto súper importante que tiene que tener un ejercicio de fútbol y es que tiene que generar emoción. Esto porque el mayor nivel de aprendizaje que se da en una situación de entrenamiento es cuando alguien o cuando algo te produce emoción.
Os lo pongo de esta manera: ¿recordáis algún entreno, o rutina de entrenamientos, que os haya dejado sin sensaciones?. Quisiera saber tu respuesta en los comentarios, pero seguramente muchos ni recordarán algún entreno de este tipo.
Detrás de toda actividad gratificante hay una emoción que despierta en cada uno. Y esto lo tenemos que trasladar inteligentemente a los ejercicios de fútbol de nuestros entrenos.
Son esas emociones las que te permiten interiorizar el concepto. De esta manera quedará mucho mejor grabado ese concepto en el jugador. Pero quizá tú estarás pensando: “ya, claro, ¿y cómo generó emoción?”. Sencillo, usa refuerzos.
Usa los refuerzos positivos y negativos para saber qué tiene que tener un ejercicio de fútbol
- Administra bien los refuerzos negativos
Genera emoción mediante dos maneras: con los refuerzos positivos y los refuerzos negativos. Mucha gente piensa que los positivos funcionan mejor que los negativos y ambos funcionan de la misma manera.
El único problema que hay es que el refuerzo negativo genera una actitud incorrecta para el siguiente ejercicio, y consecuentemente para los siguientes conceptos. De tal manera, que el ejercicio deja de ser divertido porque el jugador se está llevando un refuerzo negativo.
- Aprovecha los refuerzos positivos
Los refuerzos positivos, en este caso, sí que nos permiten mantener una actitud continua de positivismo dentro del ejercicio. De estar haciendo bien las cosas. ¿Y a quién no le gusta saber que estás haciendo bien las cosas? ¡Pues a todos nos gusta!
Entonces en ese sentido cuando tú refuerzas positivamente a un jugador, ellos están mejorando su actitud hacia esa acción. De este modo vas a ver la repe más veces y ya hablaremos en otra entrada que además del refuerzo positivo del alma y del refuerzo negativo está el refuerzo neutro.
Consideraciones finales sobre qué tiene que tener un ejercicio de fútbol…
Como ven, incorporar los refuerzos adecuados a tus ejercicios de fútbol no solo garantiza despertar emociones a tus jugadores, sino que les dejas bien fijado el concepto que querías enseñar.
El aspecto emocional se ha ido incorporando con ahínco en toda disciplina deportiva. Y eso es algo esencial que tiene que tener un ejercicio de fútbol. Nunca está de más recordar que entrenamos personas y no máquinas.
Ya para finalizar, me gustaría saber tu opinión acerca de lo que tiene que tener un ejercicio de fútbol para hacerlo significativo para nuestros jugadores. Claro, a parte de los tres puntos que tratamos en la entrada de hoy.
Si tienes experiencia, ¡compártenos tus anécdotas!. Y los que se inician como entrenadores, ¿qué ideas se os ocurre para añadir emoción y humanidad a tus entrenamientos?
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