Los jugadores ponen a prueba los límites. ¿Estás preparado para gestionarlo?
Detectar la falta de autoridad en un equipo de fútbol es una habilidad clave para cualquier entrenador.
Porque sí, los jugadores —sean niños o adultos— ponen a prueba los límites. Siempre.
Y lo hacen por algo muy simple:
Quieren saber quién manda, cuáles son las reglas reales, hasta dónde pueden estirar la cuerda antes de que se rompa.
¿Sientes que estás perdiendo el control de tu equipo? Escríbeme por privado en @aprende.entrenando y vemos cómo reconducirlo.
La prueba constante de autoridad: algo natural, pero que no puedes ignorar
- En categorías inferiores, ocurre de forma inconsciente.
- En adultos, aparece con más sutileza.
Pero en ambos casos, es una llamada a tu liderazgo.
Porque si no respondes con claridad, lo que llega es el caos silencioso.
La diferencia entre “mano libre” y descontrol
He observado muchos entrenadores con estilos opuestos:
- Los que lo permiten todo en nombre de la libertad
- Los que lo controlan todo en nombre de la autoridad
Y en medio de esos extremos, el jugador explora su terreno.
Sabe cuándo puede tomar decisiones por su cuenta.
Sabe cuándo el entrenador no va a intervenir.
Y cuando eso se convierte en norma, el respeto desaparece.
Señales claras de un equipo sin autoridad
Si ves esto en entrenamientos o partidos, toma nota:
- Jugadores que se cambian solos sin permiso
- Equipos que finalizan un partido sin escuchar la charla del entrenador
- Entrenamientos sin orden ni intencionalidad
- Comportamientos irrespetuosos que no se corrigen
Esto no es falta de técnica.
Es falta de liderazgo, de límites, de cultura de equipo.
La autoridad sana no impone, estructura
Yo busco siempre una fórmula clara:
- Respeto
- Disciplina
- Comunicación
- Empatía
Porque no creo en gritar para que te respeten.
Creo en explicar, sostener, y mantenerte firme.
Y aunque esta actitud no siempre es bien recibida, prefiero un equipo que me respete a uno que me tolere.
El equilibrio es posible: límites + humanidad
Ser un entrenador respetado no es ser temido.
Es ser alguien que marca límites con humanidad.
- Que pone orden sin humillar
- Que escucha sin perder autoridad
- Que exige sin desconectar
Si quieres trabajar ese equilibrio con claridad, escríbeme por privado en @aprende.entrenando